Goodbye New Zealand, Welcome Home!

Salimos del aeropuerto de Auckland el 19 de Abril, a las 17hs, y por esas cosas extrañas de los husos horarios, aterrizamos en Buenos Aires el mismo día, a la misma hora. Un año después para Demi, seis meses más tarde para mí.
Este viaje fue una gran experiencia y nos enseñó muchas cosas. Principalmente el desafío estuvo en afrontar todo lo que nos tocó juntos, desde las mañanas frías en el campo, los días larguisimos en el lodge, el robo donde se llevaron casi todo, y después la aventura única que fue recorrer Asia.
Cada caminata, cada lugar nuevo, cada persona que se cruzó en nuestro camino formó parte de esta historia que hoy se cierra en este blog.
Gracias por compartirla con nosotros.
Acá va este último post con un 'resumen' en imágenes y palabras breves, de estos seis meses de viaje juntos.
Hasta la próxima!

Dani y Demi.

* * *
Foto para el recuerdo! Los días de Kiwi Workers quedaron muy atrás y nos dejaron muchos recuerdos y un cariño especial por Te Puke. Acá en la hora del smoko!


Rotorua.

Quizá algo que marcó la mitad del viaje, fue un antes y un después. Un momento duro que nos dejó con mucha bronca, pero también nos enseñó que se puede salir adelante y así fue. Con pasaportes y trabajo nuevo, al poco tiempo estuvimos listos para la aventura nuevamente, y planificando el viaje a Asia.
Y, sinceramente, Clarín nos trajo una notoriedad inesperada...! Así que valía la pena representar este momento con esta imagen, no?

Taupo nos recibió después del ´golpe´, con casa y trabajo nuevo. Una experiencia distinta, porque del campo y la soledad de los kiwis, pasamos a ser housekeepers de uno de los mejores hoteles del mundo, rodeados de gente de todas las nacionalidades, la mayoría viajando como nosotros.


Después de trabajar duro, recuperados del robo y con pilas nuevas, se cumplió nuestro sueño: Viajar al Sudeste Asiático. Un viaje impresionante que nos llevó por islas, selvas, ríos, montañas y mar. Nos empapamos de la cultura asiática y budista, nos cansamos de recorrer templos y usamos todos los medios de transporte habidos y por haber! Acá va un mini resumen de esos 33 días inolvidables...


Bangkok nos avasalló... Un lugar único, donde conviven el tráfico caótico y los monjes tranquilísimos. Los templos nos deslumbraron y recorrimos la ciudad viajando en los típicos tuk tuk.


Del caos de la ciudad pasamos a la serenidad de las playas exóticas en las islas del sur de Tailandia, Kho Samui y Kho Phangan.


De las islas muy al sur de Tailandia, viajamos a la selva del lejano norte, árido, caluroso e impactante. Dos días de trekking, que incluyeron noche en la montaña, paseo en elefante y rafting en balsas de bamboo... Mucha aventura!


El viaje de dos días en bote por el Río Mekong, sin duda valió la pena para llegar a conocer a Luang Prabang, en Laos, y sus espectaculares baguettes!


Caminando por una playa vietnamita, en las costas del mar de China del Sur, en Natrang, Vietnam.


Perdidos (y con más de 40º de calor!)recorriendo la maravilla del Angkor Wat, en Siem Reap, Cambodia.


De Cambodia volvimos a la base en Bangkok y volamos a New Zealand. Nos quedaban casi 20 días de recorrida antes de volver a casa... Así que otro avión más nos llevó a la isla sur, recorriendo varias ciudades. Acá estamos en el Abbel Tasman National Park, uno los tantos trekkings que hicimos y de los mejores!

Después de pasar los últimos días recorriendo ciudades, volvimos a Te Puke para cerrar nuestro viaje. Esta última foto, ya es camino a casa... Sobrevolando Buenos Aires y a minutos de reencontrarnos con nuestras familias. Qué momento!!!

Hasta la próxima aventura!